Finalizado el 8
Después de casi una semana para poder adaptarme a mi nueva situación profesional, mis pobres neuronas han dejado de recibir descargas eléctricas derivadas del estrés para poder seguir recibiendo los impulsos eléctricos de una vida más tranquila aunque intensa, gracias a esto he podido sentarme de nuevo para continuar con mi novela.
Ayer pude finalizar el capítulo ocho de "la celda de plástico" dándome así la oportunidad de revisar mis notas para iniciar en breve el camino que me llevara a escribir el penúltimo capítulo de esta historia, porque querido lector ya he decidido que la novela tendrá diez capítulos...o por lo menos en estos momentos es lo que yo creo.
Una vez que ya he conseguido serenar mi ánimos mi cerebro ya está trabajando, como se dice en informática, en background nuevas ideas para relanzar mi vida profesional.
Comentarios